Meditación del Domingo 24 de Octubre de 2021 por el Pastor Oscar Vena

LIBERTAD DE ACCIÓN
Desde el principio de la creación, Dios estableció su Propósito, es decir su Plan para toda su creación.
Cuando cada uno de nosotros, hacemos o decimos algo, estamos realizando una declaración espiritual.
Como decíamos hace unas semanas, aunque no tomemos conciencia de esta realidad o queramos hacer como hace el avestruz… (esconder la cabeza debajo de la tierra, como si haciendo esto, lo que realmente pasa, desaparezca…) …cada ser humano… vos y yo… nacemos, vivimos y morimos… dentro de una guerra espiritual.
Entonces cada acción u omisión de nuestra parte, es una declaración espiritual.
Es decir, hacemos público en primer término, para el mundo espiritual, cuál es nuestra posición en esta contienda.
En otras palabras, demostramos, de que lado estamos…
Y cada acción, cada palabra, cada pensamiento, cada deseo… cuenta.
Cuando Jesús llamó a sus discípulos en Marcos 3, leemos:
Marcos 3:13-15 /NBLA
13 Después Jesús subió al monte, llamó a los que Él quiso, y ellos vinieron a Él.
14 Designó a doce, para que estuvieran con Él y para enviarlos a predicar,
15 y para que tuvieran autoridad de expulsar demonios.
Y en Lucas 9.1-6 leemos…
que les dio poder y autoridad sobre todos los demonios y para sanar enfermedades,
y los envió a proclamar el Reino de Dios y a sanar a los enfermos.
¿Qué significa que Jesús les dio poder y autoridad a sus discípulos?
La palabra que se traduce como AUTORIDAD es exousía
Que significa:
ἐξουσία : exousía
-
Poder de elección, libertad de hacer lo que uno quiera.
-
El poder de autoridad (influencia) y del derecho (privilegio)
-
El poder del gobierno o el gobierno (autoridad sobre …)
Tratando de pasar en limpio… digamos entonces que cuando Jesús nos delegó o nos dio AUTORIDAD, lo que hizo es darnos la LIBERTAD DE ACTUAR Y LA AUTORIDAD PARA HACERLO.
Si podemos meditar en esto… vamos a darnos cuenta de que todo lo que hagamos o digamos tiene una trascendencia espiritual que nos sobrepasa infinitamente, y que afecta claramente no sólo nuestras vidas sino que al formar parte de un cuerpo espiritual como la iglesia, afecta también la vida de muchos…
Muchos más de los que podemos imaginarnos.
Podríamos decir que con nuestros hechos y palabras, podemos bendecir… que es, entre otras cosas, para lo cual el Señor nos delegó su Autoridad, pero también podríamos llegar a mal utilizar esa libertad de acción y no bendecir…
El apóstol Pablo, utiliza la misma palabra (exousía) para exhortar a los hermanos en Corinto y llamarles la atención para que esa LIBERTAD DE ACCIÓN no sea piedra de tropiezo para los más débiles…
1 Corintios 8:9 /NBLA
Pero tengan cuidado, no sea que esta libertad de ustedes de alguna manera se convierta en piedra de tropiezo para el débil.
UNA ACCIÓN DE GUERRA
Vemos entonces que todo lo que hacemos es un acto de guerra espiritual.
Colosenses 3:17 /NBLA
Y todo lo que hagan, de palabra o de hecho, háganlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias por medio de Él a Dios el Padre.
/NTV
Y todo lo que hagan o digan, háganlo como representantes del Señor Jesús y den gracias a Dios Padre por medio de él.
Cuando dice: “…háganlo todo en el nombre del Señor Jesús”… nos está diciendo que todo lo que hacemos es en “su lugar”… y esto es así, porque somos sus representantes.
Cuando un embajador en un país extranjero realiza un acto o dice una palabra, lo hace en representación de su país, de su gobierno y es como si su país lo estuviera haciendo.
Es por esto, que en la esfera espiritual, todos nuestros actos, tienen un peso eterno.
SUS REPRESENTANTES
2 Corintios 5:20 /NTV
Así que somos embajadores de Cristo; Dios hace su llamado por medio de nosotros. Hablamos en nombre de Cristo cuando les rogamos: «¡Vuelvan a Dios!».
Notemos que importancia tiene nuestra palabra.
Aquí Pablo les dice…
“Somos embajadores y Dios hace un llamado por medio de nosotros”.
No es sólo palabra de hombre sino es Dios hablando a través del hombre.
Es por esto también que Dios nos dice que en nuestra boca tenemos el poder de dar vida o de dar muerte… ufff…
Hay Poder y Autoridad en nosotros.
No podemos ser inconscientes con esto.
Si estamos en Cristo.
Si decimos ser hijos de Dios.
Si decimos ser sus discípulos.
Entonces debemos tomar en cuenta que hay Poder y Autoridad en nuestras vidas.
Poder y Autoridad que nos ha sido delegada y por la cual deberemos de dar cuenta.
SIN LUGAR PARA LOS NEUTRALES
Cuando mis actos, están de acuerdo a la Voluntad de Dios, entonces estos actos son un Posicionamiento espiritual.
Es un paso al frente.
Es una afirmación del Reino de Dios en donde estoy.
Es un avance del Reino de Dios sobre el reino de las tinieblas.
Y entonces esa acción, va a estar bendecida y potenciada por el Espíritu de Dios.
Y esto es una verdad espiritual que no podemos pasar por alto.
Por el contrario, cuando decido hacer algo que va en contra de la voluntad de Dios, en lugar de dar un paso al frente es un paso para atrás.
Doy lugar a que el reino de la tinieblas y el poder del anticristo avance.
Es un retroceso del Reino de Dios.
Y lo que haga, va a traer maldición en lugar de bendición.
Ejemplo:
Cuando en lugar de congregarme, de estar en una relación de discipulado, en lugar de estar relacionado con el cuerpo de Cristo, me quedo en mi casa, me ocupo de mis cosas sin dar cuenta a nadie, estoy declarando que lo más importante soy yo y no Dios, entonces por mi acción u omisión permito que espiritualmente el reino de las tinieblas avance, porque precisamente hago lo que nuestro enemigo quiere que haga.
Por el contrario, cuando por ejemplo en el trabajo, en el estudio, doy mi testimonio, hablo del Señor, trabajo con responsabilidad, hablo verdad, el Reino de Dios avanza, ocupa territorio del enemigo.
Hay un pasaje muy fuerte en Filipenses 3
Filipenses 3:17-19 /NBV
17 Hermanos, sigan todos mi ejemplo y fíjense en los que siguen el ejemplo que les hemos dado.
18 Ya se los he dicho muchas veces, y ahora se los vuelvo a decir con lágrimas, que muchos se comportan como enemigos de la cruz de Cristo.
19 El futuro de ellos es la destrucción, porque su dios es su propio apetito y están orgullosos de lo que debería darles vergüenza. Sólo piensan en las cosas de este mundo.
No nos olvidemos: ¡Estamos en guerra!
Y por lo tanto, todos nuestros actos, son actos de guerra.
Y en esta contienda, No hay lugar para los Neutrales.
Por otro lado, debemos remarcar que
Lo que decimos es tan fuerte como lo que hacemos.
En el pasaje de Colosenses leíamos: “…todo lo que hagan … de palabra o de hecho…”.
Lo que decimos, es también un acto de guerra.
Entonces no podemos minimizar la importancia de lo que sale de nuestra boca.
No podemos decir lo que sea.
1 Pedro 4:11 /BLPH
El que habla, que comunique palabra de Dios; el que presta un servicio, hágalo consciente de que es Dios quien le da las fuerzas. Así, en todo lo que hagan, Dios resultará glorificado por medio de Jesucristo, a quien pertenecen la gloria y el poder por siempre y para siempre. Amén.
Aquí el apóstol Pedro nos dice que lo que hablamos debe ser la palabra de Dios.
No cualquier palabra. Sino la palabra de Dios.
Es decir lo que Dios dice y cómo Dios lo dice.
Pablo decía en Efesios 4.29 que no debe salir de nuestra boca ninguna palabra corrompida, o mala sino la que sea para la edificación de los que la escuchan.
¿Qué son las palabras malas o corrompidas?
Obscenidades, Conversaciones indecentes, Chistes groseros, vulgares, de doble sentido, Insultos, Lenguaje ofensivo …
Pero también una expresión mala o corrompida es una expresión de incredulidad o falta de fe.
Como recién dijimos, debemos decir lo que Dios dice…
Así como las acciones se traducen en un avance o retroceso del Reino de Dios o del de las tinieblas, las palabras también.
DEBEMOS HABLAR VERDAD
Por esto también el Señor nos dice en Efesios 4.25
Efesios 4:25 /NBLA
Por tanto, dejando a un lado la falsedad, hablen verdad cada cual con su prójimo, porque somos miembros los unos de los otros.
¿Qué es hablar VERDAD?
Es decir lo que Dios dice.
Jesucristo es el CAMINO, LA VERDAD y LA VIDA.
No podemos circunscribir nuestra vida, nuestras acciones y nuestras palabras, simplemente a lo que vemos.
Porque lo que vemos está en un mundo caído.
Debemos hablar de acuerdo a lo que no vemos.
En concordancia con lo que Dios dice y con lo que Dios hizo por nosotros.
2 Corintios 5:7
Porque por fe andamos, no por vista.
Lo que decimos de los demás y aún de nosotros mismos, debe estar tamizado por lo que Dios dice y lo que Dios hizo.
Debemos liberarnos de las ataduras de nuestra naturaleza caída, que nos hace bajar la mirada y observar sólo lo de este mundo. Su realidad triste y sin esperanza.
Por el contrario, debemos levantar nuestra vista y mirar en fe cada vida, cada situación.
DECLARACIÓN DE FE
Como dice Colosenses 3, poner la mira en las cosas de arriba y no en las de la Tierra.
Porque cada palabra que emitimos es una declaración de nuestra posición espiritual.
Con lo que digo, expreso donde estoy.
Por ejemplo si al hablar de mi, lo hago mirando solamente mi humanidad, mis debilidades, mis pecados, entonces lo que diga será una declaración de derrota, de retroceso, porque en mi humanidad no hay esperanza y lo que hay es derrota. Porque mi naturaleza caída es una naturaleza derrotada por el pecado.
Por el contrario cuando me miro a través de la obra maravillosa de Cristo en la cruz, entonces, la declaración que pueda hacer sobre mi vida va a ser una declaración de victoria, de esperanza, de fe. Voy a decir lo que Dios dice de mí. Voy a declarar donde Dios dice que estoy y donde dice que voy a estar. Y aún sin todavía ver la obra terminada, voy a declarar donde estaré por la gracia de Dios.
Entonces nuestros dichos serán un avance del Reino de Dios.
Serán una Declaración de Principios contra toda potestad espiritual.
Serán la declaración de victoria sobre el pecado, sobre la muerte y sobre Satanás.
Debemos cambiar nuestra forma de hacer y de hablar.
El día es HOY.
Romanos 13:11-14 /NVI
11 Hagan todo esto estando conscientes del tiempo en que vivimos. Ya es hora de que despierten del sueño, pues nuestra salvación está ahora más cerca que cuando inicialmente creímos.
12 La noche está muy avanzada y ya se acerca el día. Por eso, dejemos a un lado las obras de la oscuridad y pongámonos la armadura de la luz.
13 Vivamos decentemente, como a la luz del día, no en orgías y borracheras, ni en inmoralidad sexual y libertinaje, ni en disensiones y envidias.
14 Más bien, revístanse ustedes del Señor Jesucristo, y no se preocupen por satisfacer los deseos de la naturaleza pecaminosa.