Aferrados

El domingo pasado meditábamos sobre la necesidad que tenemos de poner nuestra atención y deleitarnos en las realidades celestiales y en las verdades del Reino de Dios.

Y también decíamos que Dios nos ha dado su fe para que esto que parece una locura sea una experiencia real en la vida de cada discípulo del Señor.

Con esto en mi corazón, hoy quiero que sigamos meditando en la fe.

¿Qué es la fe?

Hebreos 11:1 /NTV

La fe demuestra la realidad de lo que esperamos; es la evidencia de las cosas que no podemos ver.

Esta versión encaja perfecto con lo que meditábamos la semana pasada en cuanto a poner nuestro deleite en las realidades celestiales.

“La fe demuestra la realidad de lo que esperamos…”

Es por medio de la fe que podemos contemplar, lo que tenemos de parte de Dios en Cristo nuestro Señor.

Es por medio de la fe que podemos deleitarnos en la herencia que tenemos por haber sido hecho hijos juntamente con Cristo.

Como decíamos hace unos domingos: “Sin fe somos impotentes para agradar a Dios”.

Sin fe no tenemos poder para vivir agradando a Dios.

Es por esto que Dios viene a hacer morada en nosotros para que su Espíritu Santo, es decir el Espíritu de Cristo, viva en nosotros y a través de nosotros.

Esto quiere decir que en nosotros tenemos la fe de Cristo.

Nuestro Señor… ¿era un hombre de fe?

Esa misma fe… su cantidad y calidad… es la que todos los discípulos del Señor tenemos.

Si esto es así… ¿por qué vivimos como vivimos?

En primer lugar puede ser por ignorancia… es decir que no sabemos lo que tenemos en Cristo.

En cuanto a esto, espero que el Señor nos abra el entendimiento para que comprendamos lo que tenemos.

Dice el Señor en su Palabra, en 

2 Pedro 1:3-4 /NTV

3 Mediante su divino poder, Dios nos ha dado todo lo que necesitamos para llevar una vida de rectitud. Todo esto lo recibimos al llegar a conocer a aquel que nos llamó por medio de su maravillosa gloria y excelencia; 4 y debido a su gloria y excelencia, nos ha dado grandes y preciosas promesas. Estas promesas hacen posible que ustedes participen de la naturaleza divina y escapen de la corrupción del mundo, causada por los deseos humanos.

Cuando Dios dice que nos dio “todo lo que necesitamos…” es indudable que incluye la fe.

Y en segundo lugar, porque no permitimos que la fe que tenemos se desarrolle, se despliegue… 

Necesitamos entender que la fe debe empapar toda nuestra vida.

Recuerdo que cuando hablamos de fe, no hablamos de sólo creer que Dios existe… sino de Creer en todo lo que Dios dice.

 

Nuestra existencia, nuestro andar, nuestro caminar, transitar, comerciar, estudiar, trabajar, educar, hablar… todo, absolutamente todo, debe estar teñido por la fe.

Así como la fe nos permite vislumbrar las realidades celestiales y las verdades de Dios, cuando contemplamos estas realidades y creemos en cada una de estas verdades celestiales, nuestra fe crece, se desarrolla, se despliega.

Y este “círculo virtuoso” es un proceso necesario que todo hijo de Dios necesita experimentar.

Hay un versículo sobre la fe que escuchamos bastante y que se repite en 3 oportunidades en la Palabra de Dios …

Hebreos 10:37-38 /NBLA

37 Porque dentro de muy poco tiempo, El que ha de venir vendrá y no tardará.

38 Mas Mi justo vivirá por la fe; Y si retrocede, Mi alma no se complacerá en Él.

Vivir por la fe, significa en primer lugar que estábamos muertos en nuestros delitos y pecados pero ahora vivimos en Dios y para Dios por la fe en Jesús, en su muerte y en su resurrección, y en que Dios le ha hecho Señor y Cristo.

Pero también “vivir por la fe” o “por medio de la fe” significa que nuestra vida, nuestro caminar hasta que el Señor venga a buscarnos es por fe. 

Otro pasaje lo dice así:

2 Corintios 5:7 /NBLA

(Porque por fe andamos [vivimos], no por vista).

¿Queremos que nuestras vidas se parezcan cada día más a Jesús?

¿Deseamos que nuestra familia cambie?

¿Anhelamos que nuestro pais cambie?

Debemos vivir o andar por fe.

Podríamos decir que es necesario que toda nuestra vida la pasemos a través del filtro de la fe.

 

En base a Hebreos 11, me gustaría señalar cómo la fe es un ingrediente fundamental en todos los aspectos de nuestra vida.

 

– Por la Fe ENTENDEMOS [comprendemos, reflexionamos]

Comúnmente se dice: “ver para creer”.

En cambio, Dios dice que por medio de la fe podemos comprender, reflexionar y entender.

 

– Por la Fe ADORAMOS

Adorar es ofrecer nuestra vida para agradar a Dios. Es poner en primer lugar a Dios en nuestra vida. Sin fe esto es imposible.

Pero la fe es lo que me motiva y me impulsa a hacerlo.

 

– Por la Fe NO MORIREMOS

El ser humano sin Dios, sin fe en Cristo y en su obra, le teme a la muerte. Y este temor es la base de todo tipo de temor. Temores que atan, oprimen y esclavizan a millones de seres humanos hoy. 

Pero es por medio de la fe que Dios nos hace libres de todo temor porque el nos libró de la muerte.

 

– Por la Fe PODEMOS AGRADAR A DIOS

Sin fe: impotentes.

Con fe: poderosos en Dios.

 

– Por la Fe HACEMOS LA OBRA QUE DIOS NOS ENCARGA

Aún sin saber o sin comprender el porqué o el para qué, es por medio de la fe que podemos realizar lo que Dios nos pide.

 

– Por la Fe OBEDECEMOS SIN PEDIR RAZONES

Esto va de la mano con el anterior.

Por lo general, cuando nos piden que hagamos algo pedimos razones y queremos saber el porqué y el para qué… 

Pero si confiamos en Dios, en sus propósitos, en sus cuidados, en definitiva en todo lo que EL es… 

Obedecemos.

 

– Por la Fe CAMINAMOS Y HABITAMOS ESTE MUNDO COMO EXTRANJEROS Y PEREGRINOS

Es por la fe que entendemos que todo en esta vida es pasajero y que nuestra ciudadanía está en los cielos. Así que lo que nos interesa no es hacer tesoros en esta Tierra sino Tesoros en los Cielos.

 

– Por la Fe RECIBIMOS FUERZAS Y MILAGROS DEL SEÑOR

Así como Sara a sus 90 años recibió fuerzas y el milagro de ser madre, nosotros recibimos la fuerza y el poder de Dios por medio de su Espíritu cuando creemos en las promesas de Dios para nosotros.

 

– Por la Fe PASAMOS LA PRUEBA VENCIENDO

El ser humano le teme a las pruebas. Pero es por medio de la fe que creemos que Dios es poderoso para darnos el poder y la salida para vencer la prueba. También es por medio de la fe que confiamos aún cuando estemos pasando por el valle de sombra y de muerte…

 

– Por la Fe BENDECIMOS

En lugar de maldecir, bendecimos.

Aunque lo que veamos no concuerde con nuestras expectativas, bendecimos.

Porque bendecir es un acto de fe.

 

– Por la Fe CREEMOS EN LA PALABRA DE DIOS

Por la fe la Palabra de Dios cobra vida en nosotros.

Es por medio de la lectura de la Palabra de Dios que nuestra fe se desarrolla, se despliega y es por medio de esa fe que se despliega que creemos en la Palabra de Dios.

 

– Por la Fe NO TENEMOS MIEDO A NADA NI NADIE POR MÁS PODEROSO QUE SEA

Las personas pueden querer atemorizarnos, pero es por medio de la fe que conocemos a quien está con nosotros.

El cual es más poderoso que cualquier criatura.

Sabemos que Él está con nosotros como Poderoso gigante y que prometió que nunca nos iba a abandonar.

Es por esto que Nadie por mas poderoso que sea, se puede comparar con nuestro Padre Celestial.

 

– Por la Fe ELEGIMOS SUFRIR POR CRISTO ANTES QUE VIVIR LEJOS DE ÉL

Naturalmente el ser humano tiene un instinto de conservación que muchas veces nos mantiene a salvo de los peligros.

Pero cuando lo que nos pasa no lo filtramos a través de la fe ese instinto de conservación junto al temor a la muerte nos hará tomar las decisiones equivocadas.

Por lo cual es necesario, que toda circunstancia la analicemos con los lentes de la fe. 

Sólo así entenderemos las situaciones y tomaremos la mejores decisiones de acuerdo a lo que Dios quiere.

 

– Por la Fe PERSEVERAMOS

Es imposible para el ser humano “seguirle el ritmo a Dios”.

Isaías 40:29-31 NTV

29 Él da poder a los indefensos y fortaleza a los débiles.

30 Hasta los jóvenes se debilitan y se cansan, y los hombres jóvenes caen exhaustos.

31 En cambio, los que confían en el Señor encontrarán nuevas fuerzas; volarán alto, como con alas de águila.
Correrán y no se cansarán; caminarán y no desmayarán. 

 

– Por la Fe CELEBRAMOS 

Por qué celebramos? Hay motivos?

Si sólo miramos a nuestro alrededor con nuestros ojos, los motivos de celebración son escasos y esporádicos.

Pero si levantamos la mirada y ponemos nuestros ojos en la Victoria de Cristo, SIEMPRE HAY MOTIVOS PARA CELEBRAR.

 

– Por la Fe ATRAVESAMOS LAS DIFICULTADES Y SALIMOS VICTORIOSOS

Romanos 8:36-37 /NBV

36 Las Escrituras dicen: «Por tu causa nos amenazan de muerte todo el tiempo, nos tratan como a ovejas de matadero».

37 A pesar de todo, nuestra victoria es absoluta, gracias a Cristo que nos amó.

 

– Por la Fe NUESTRA DEBILIDAD SE CONVIERTE EN FORTALEZA

 

 

– Por la Fe TENEMOS ESPERANZA

Romanos 15:13 /NTV

Le pido a Dios, fuente de esperanza, que los llene completamente de alegría y paz, porque confían en él. Entonces rebosarán de una esperanza segura mediante el poder del Espíritu Santo.

 

Conclusión:

Agradar a Dios no es imposible para el hijo de Dios.

Agradar a Dios no es imposible si vivimos llenos del Espíritu de Cristo.

No lo es porque Cristo mismo vive en nosotros y su misma fe en Calidad y en Cantidad está en nosotros.

Lo único que tenemos que hacer es caminar.

AFERRADOS de su mano.

Día a día.

Y de la misma manera que un niño crece y madura aún sin darse cuenta… así también nosotros, caminando de la mano de nuestro Padre Celestial, teniendo intimidad con Él, buscando de su presencia, mirando a través de sus ojos, a través de su Palabra, creceremos a la misma imagen de su Hijo Jesucristo.

No dejes que nada ni nadie te desanime.

TODO ES POSIBLE SI PUEDES CREER.